Antología de la literatura españolaCuenca, Impr. des Seminario conciliar, 1926 - 586 pagine |
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Pagina 102
... Deja ahora de jugar , que me es dolor importuno , no me hagas más penar , que en verte cerca del mar tengo celos de Neptuno . Causa mi triste cuidado , que a mi pensamiento crea , por que ya está averiguado , que si no es tu enamorado ...
... Deja ahora de jugar , que me es dolor importuno , no me hagas más penar , que en verte cerca del mar tengo celos de Neptuno . Causa mi triste cuidado , que a mi pensamiento crea , por que ya está averiguado , que si no es tu enamorado ...
Pagina 173
... - pearle de modo que le tapa del todo , y le quita la respiración ; y con ésto se vuelve a su canoa , que tiene asida al lado de la ballena , con una cuerda ; pero deja primero bien atada su cuerda SIGLO XVI : PROSA VARIA 173.
... - pearle de modo que le tapa del todo , y le quita la respiración ; y con ésto se vuelve a su canoa , que tiene asida al lado de la ballena , con una cuerda ; pero deja primero bien atada su cuerda SIGLO XVI : PROSA VARIA 173.
Pagina 174
Juan Hurtado y Jiménez de la Serna. una cuerda ; pero deja primero bien atada su cuerda a la ballena , y ha- ciéndose a un lado con su canoa , va así dando cuerda a la ballena . La cual , mientras está en mucha agua , da vueltas a una ...
Juan Hurtado y Jiménez de la Serna. una cuerda ; pero deja primero bien atada su cuerda a la ballena , y ha- ciéndose a un lado con su canoa , va así dando cuerda a la ballena . La cual , mientras está en mucha agua , da vueltas a una ...
Pagina 204
... deja a veces de matar al que viene a matar a él . De ninguna cosa son los hombres tan pródigos como del tiempo . siendo la cosa que menos tienen y más han menester . Dos caballeros comendadores fueron huéspedes de un ami- go y deudo ...
... deja a veces de matar al que viene a matar a él . De ninguna cosa son los hombres tan pródigos como del tiempo . siendo la cosa que menos tienen y más han menester . Dos caballeros comendadores fueron huéspedes de un ami- go y deudo ...
Pagina 234
... Deja tu albergue oculto , mudo silencio ; que en el margen frío deste sagrado río , y en este valle solitario inculto , te aguarda el pecho mío . Entra en mi pecho , y te diré medroso lo que a ninguno digo , de que es amor testigo , y ...
... Deja tu albergue oculto , mudo silencio ; que en el margen frío deste sagrado río , y en este valle solitario inculto , te aguarda el pecho mío . Entra en mi pecho , y te diré medroso lo que a ninguno digo , de que es amor testigo , y ...
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Antología de la literatura española Juan Hurtado y Jiménez de la Serna,Ángel González Palencia Visualizzazione completa - 1926 |
Parole e frasi comuni
agora agua alegre Aliatar alma amigo amor ansí aqueste assí BALTASAR DEL ALCÁZAR Bernardo del Carpio buen caballero caballo calle canto castellana Castilla céfiro ciego cielo comedia Conde contento corazón criado cristiano dama decir deja dexa dice Diego Diego de Ordaz digo dijo dió divino dixo dolor dulce Duque engaño enojo Enrique Enrique de Villena espada espanto España español esperanza estaba eterno fiero Firdusi flores fortuna fuego gente gloria guarda Guillén de Castro hablar halló hermosa hermosura hijo hizo honra Jorge Manrique lengua libros llama llegó llorar Lope Lope de Vega luego Madrid mandó mano matar mira morir muero muerte mujer mundo Nerón noche obras ojos padre pág paso pecho Pedro poeta pudo quiero quiso reino romance saber salir sangre Séneca Sevilla sombra soneto sueño tengo tenía tierra triste Véase ventura viento vino virtud vive vuesa
Brani popolari
Pagina 84 - Qué descansada vida La del que huye el mundanal ruido, Y sigue la escondida Senda por donde han ido Los pocos sabios que en el mundo han sido ! Que no le enturbia el pecho De los soberbios grandes el estado, Ni del dorado techo Se admira fabricado Del sabio moro, en jaspes sustentado...
Pagina 271 - Opinión ninguna gana, pues la que más se recata, si no os admite, es ingrata, y si os admite, es liviana. Siempre tan necios andáis, que con desigual nivel a una culpáis por cruel ya otra por fácil culpáis.
Pagina 35 - Ay de mi Alhama! Cartas le fueron venidas que Alhama era ganada: las cartas echó en el fuego y al mensajero matara. Ay de mi Alhama! Descabalga de una muía y en un caballo cabalga; por el Zacatín arriba subido se había al Alhambra. Ay de mi Alhama!
Pagina 241 - Estos, Fabio ¡ay dolor! que ves ahora campos de soledad, mustio collado, fueron un tiempo Itálica famosa; aquí de Cipión la vencedora colonia fue': por tierra derribado yace el temido honor de la espantosa muralla, y lastimosa reliquia es solamente de su invencible gente.
Pagina 265 - Salíme al campo, vi que el sol bebía los arroyos del yelo desatados, y del monte quejosos los ganados, que con sombras hurtó su luz al día. Entré en mi casa; vi que, amancillada, de anciana habitación era despojos; mi báculo, más corvo y menos fuerte; vencida de la edad sentí mi espada. Y no...
Pagina 254 - ¿Qué tengo yo, que mi amistad procuras? ¿Qué interés se te sigue, Jesús mío, que a mi puerta, cubierto de rocío, pasas las noches del invierno escuras?
Pagina 75 - ¿Quién me dijera, Elisa, vida mía, Cuando en aqueste valle al fresco viento Andábamos cogiendo tiernas flores, Que había de ver con largo apartamiento Venir el triste y solitario día Que diese amargo fin a mis amores...
Pagina 270 - Hombres necios que acusáis a la mujer sin razón, sin ver que sois la ocasión de lo mismo que culpáis : si con ansia sin igual solicitáis su desdén, ¿ por qué queréis que obren bien si las incitáis al mal?
Pagina 161 - ... el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte.
Pagina 89 - Y dejas, Pastor santo, tu grey en este valle hondo, escuro, con soledad y llanto, y tú rompiendo el puro aire, te vas al inmortal seguro...